Por Jessica Castillejos / Excélsior
Ciudad de México
Viernes 14 de agosto, 2009
Mañana llega de China la tuneladora que construirá nueve kilómetros subterráneos de la Línea 12 del Metro, de Mexicalzingo a Mixcoac.
La máquina, llamada Escudo de Presión Balanceado (EBP), tuvo un costo de casi 25 millones de dólares y es propiedad del consorcio encargado de las obras, conformado por ICA-Carso-Alstom, y su armado llevará casi mes y medio, por lo que se comenzará a utilizar a finales de octubre.
Su longitud es de 100 metros; su diámetro, de 9.10 metros, y fue diseñada exclusivamente para el suelo de esa zona del DF.
Enrique Horcasitas, director general del Proyecto de la Línea 12, explicó que el escudo es marca Robbins y tiene tecnología japonesa Mitsubishi, pero que se ensambló en China.
Desde marzo pasado la empresa Robbins estableció una oficina en México con el propósito de ofrecer soporte técnico a todos los proyectos en los que se empleen maquinaria y tecnologías de la firma.
El EBP que llega mañana, de acuerdo con la empresa Robbins, es capaz de excavar en suelos blandos. Al frente cuenta con una cabeza rodante que corta, además de una serie de herramientas de excavación y discos cortantes simples o dobles.
La cubierta trasera de la cabeza sostiene herramientas que mezclan diferentes texturas, como por ejemplo roca dura.
Al momento que la cabeza cortante gira, se drena el desecho (lodo) a través de los compartimientos que se encuentran en la cabeza. De esta manera disminuye la posibilidad de atasco durante las obras.
Dependiendo de las condiciones del suelo, algunos aditivos pueden ser inyectados por la cabeza cortadora a través de múltiples puntos; así, la cabeza es más estable. Los aditivos pueden ser espuma, polímero o bentonita.
Este escudo puede articularse para la excavación de curvas; durante el movimiento la cabeza cortadora gira y los cilindros se extienden para empujar la máquina hacia delante.
Después de que se avanza, los cilindros internos se contraen y colocan inmediatamente un segmento de concreto por medio de una máquina ubicada en la parte trasera.
Para estabilizar el suelo y llenar los espacios que se forman durante la excavación se usa el proceso de relleno. Para ello se emplean dos líquidos que se combinan en la cola del cuerpo blindado cuando comienza el proceso de relleno.
El líquido es inyectado por varios puntos de la máquina y se derraman cubriendo todas la paredes en cada uno de los espacios, endureciéndose rápidamente.
La empresa Robbins ha manufacturado un total de 50 dobles escudos para 85 proyectos, totalizando 550 kilómetros de túneles. Actualmente cuenta con tres plantas en Estados Unidos (Ohio, Washington y Virginia Occidental) y ocho subsidiarias en igual número de países: China, Alemania, Hong Kong, India, Italia, Rumania, España y México.
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