Laura Gómez Flores
Integrantes de 50 organizaciones ambientalistas, sociales y civiles formaron un frente común para impedir la construcción de los cuatro deprimidos de Paseo de las Lomas y Palmas, la línea 12 del Metro, las obras del Eje Troncal Metropolitano y nuevas unidades habitacionales en Azcapotzalco hasta no conocer los estudios de impacto ambiental y desarrollo urbano, dados los “efectos negativos en la calidad de vida de la población en el mediano y largo plazo”.
En conferencia de prensa Miguel Valencia, de Ecomunidades; Eduardo Farah, de Espejo Polanco; Trinidad Belaunzarán, de la Asociación Salvo Lomas; Guadalupe Robles, de Pueblos Unidos de Azcapotzalco; y Tomás Hernández y Héctor Mendoza, ejidatarios de Tláhuac, entre otros, anunciaron que emprenderán acciones legales para impedir que continúen las “grandes obras capitalinas que sólo favorecen al sector privado sin escuchar la voz de la gente”, por lo que exigieron una consulta pública.
Por lo anterior se determinó crear la Red en Defensa de la Ciudad de México, que es apartidista, cuyo objetivo es “detener” las grandes obras.
jueves, 7 de agosto de 2008
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